El 8 de marzo se conmemoró el día internacional de la mujer, una
fecha que, como lo expresaron algunos, no es un día de celebración para
felicitar a las mujeres, enviarles flores y elogios por su buena labor. La historia habla de mujeres que, en 1857
peleaban por salarios más justos y condiciones laborales más humanas, pero sus
voces fueron silenciadas por la policía. 51 años después, en 1908, 15.000
mujeres se tomaron las calles de Nueva York para exigir aumento de sueldo,
menos horas de trabajo, derecho al voto y prohibir el trabajo infantil, con el
eslogan ‘Pan y Rosas’; el pan representaba la seguridad económica, las rosas una
mejor calidad de vida. Tres años más
tarde, el 25 de marzo de 1911, 100 mujeres inmigrantes, trabajadoras de la
industria textil, perdieron la vida en un incendio en una fábrica en Nueva
York. La víctima con más edad tenía 43
años y la más joven, 14 años. Esta tragedia impulsó a las mujeres a continuar
la lucha.
Aunque ha habido cambios importantes en el reconocimiento de la
dignidad de la mujer, la situación sigue siendo crítica, y se agrava con la
pandemia. El informe de la Comisión Interamericana
de Mujeres plantea que la pandemia ha incrementado las desigualdades de género,
tanto dentro de los hogares como fuera de ellos, en hospitales y centros de
salud, en el trabajo y en la vida pública. El confinamiento acrecentó el maltrato y la
violencia intrafamiliar contra mujeres y niñas que quedaron encerradas con sus
maltratadores; también aumentó la violencia en redes sociales contra ellas. Dado que el hogar se convirtió en espacio de trabajo
y estudio para todos los miembros del hogar, las tareas de la mujer se
multiplicaron, dejando poco tiempo para cuidar de ella misma.
La educación, que debe ser motor de transformación de la sociedad
en términos de equidad y calidad de vida, no se escapa a esta situación. Antes de esta pandemia Colombia ya tenía
inequidades importantes en educación básica y media; según resultados de las pruebas
PISA 2019, la brecha en matemáticas, entre hombres y mujeres, es de 20 puntos, y
en lectura es de 10,3 puntos, en contra de las mujeres. Al ingresar al sistema, los niños y niñas son
iguales en matemáticas, y las niñas son mejores en lenguaje; sin embargo, a
medida que se avanza en nivel educativo, las niñas pierden su ventaja; en
noveno la diferencia es 5 veces mayor, en 11 llega a ser 7 veces mayor, y se
mantiene en Educación Superior. ¿Será
que las niñas son menos inteligentes que los niños? No lo creo, tal vez tienen inteligencias
distintas, y puede ser que el sistema esté estructurado para promover y
estimular el desarrollo de cierto tipo de inteligencia. También puede ser que
el sistema, al igual que la sociedad, consideren que es más importante fortalecer
capacidades que favorecen el desempeño de los hombres. Algunos
estudios demuestran que, cuando una persona tiene habilidades cognitivas, esto
es aptitud para desarrollar tareas mentales, comprensión y razonamiento, tiene
más probabilidad de tener un empleo formal y un mejor salario.
La incertidumbre, el riesgo y el nivel de exposición emocional que
ha generado la pandemia en la humanidad, está afectando en mayor medida a las
personas que ya vivían en situación de desventaja. Cada vez que reviso un estudio sobre el
impacto de la pandemia, me encuentro con que la población más afectada son las
mujeres y las personas de estrato socioeconómico más bajo; y cuando esta
condición se mezcla, es decir mujeres de escasos recursos, el resultado es realmente
dramático. Creo que estas fechas de
conmemoración deberían convertirse en tiempo de reflexión, toma de conciencia y
movilización a una acción con sentido; en este caso, sobre el papel fundamental
de la mujer para el desarrollo de una sociedad más incluyente, equitativa y
solidaria. Por supuesto es tiempo de esperanza, pero
también es tiempo de aprendizaje; lo que quiere decir que necesitamos reconocer
y tomar conciencia sobre la necesidad de hacer algo diferente, porque si
seguimos haciendo más de lo mismo, el resultado no va a cambiar.
Publicado La Patria 17 de marzo 2021
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